Los hábitos alimentarios adquiridos en la primera infancia marcan las preferencias y costumbres más allá de la edad pediátrica, prevaleciendo en la mayoría a lo largo de toda la vida.

 

Por otra parte, la corrección de situaciones de malnutrición debe ser el primer nivel de tratamiento de cualquier paciente pediátrico, ya que un adecuado estado nutricional es un pilar básico para su recuperación, especialmente en niños con patología digestiva. En algunos de ellos, niños con alergias alimentarias, con enfermedad celíaca, etc. “el alimento es su (único) medicamento”.

 

Evitar errores en la alimentación, tanto del niño sano como del niño enfermo, es por tanto, una obligación para todos aquellos implicados en la atención de niño, pediatras, gastroenterólogos, hepatólogos o expertos en nutrición infantil.

 

Este libro, coordinado por el Dr. Carlos Sierra, reúne una serie de recomendaciones prácticas en los aspectos más relevantes de la alimentación infantil que ayudarán tanto a padres como a profesionales, en beneficio de nuestros pequeños y futuros adultos.